sábado, 6 de junio de 2015

Los Forgloris

Hace tiempo que un compañero de curro, y sin embargo amigo, me da la lata con eso de Quillo, a ver cuando hablas del grupo en La Bodeguita. Es un taco de pesao y de buena gente, y es por esto último que, quitándome tiempo de mis múltiples compromisos sociales, esta mañana he dedicado un rato libre en investigar una mijilla sobre el grupo musical. Lo primero, el nombre.


Los Forgloris. Se quedaron agustito cuando lo eligieron, pero bueno, vamos al lio. ¿A qué se dedican? A tocar música clásica, de la buena. ¿En dónde? En eventos, fiestas privadas, bodas, velás, verbenas y donde los llamen previo contrato. ¿Por qué lo hacen? Por amor a la música y por pasar unos buenos ratos. ¿Y la cuestión económica? Creo que por esto ná de ná. No sé cuál será el caché, pero seguro que mi colega va a tener que seguir haciendo Puntomatic un montón de años más. Vamos con el repertorio.

¿He dicho que actúan en eventos? Ah sí, lo he dicho y también he dicho que actúan en bodas. Pero no en bodas cualquieras, no, en bodas en las que los contrayentes agasajan a sus invitados con el placer de escuchar a los clásicos.

El repertorio comienza con el Bienvenidos del ínclito granaino  Don Miguel Ríos. Le sigue una extensa lista en la que se incluye el salta, el voy a pasármelo bien, chiquilla, whisky barato, mil calles llevan hacia ti, y tú de quien eres, mi gran noche, bailando, sufre mamón, escuela de calor, y así hasta más de treinta temas de música clásica.

Cuando me mandó las lista de canciones eché de menos  otros temas como el Fire on Higf de la E.L.O. o el Born In The USA del Boss, o el Europa de Santana, o el Could You Be Loved? de Bob Marley y, por supuesto algunas de los hermanos Gibb. Bueno, la verdad es que mi compañero me ha dicho eso tan recurrido de estamos en ello.

Y ahora me acuerdo de lo pesaitos que nos ponemos los tíos a eso de la hora de barralibre en los bodorrios, después de un par de bacardiconcola con lo de ¡Quillo! ¡Una de Status quo! ¡Foreve yu guon! Y las féminas, ¿Qué decir de las féminas después de tres malibuconpiña? ¡Olle! ¡la de la puerta de Alcalá, mírala, mírala, ahí estaaaa!

Bueno, reflexionando un poco, estos músicos amateurs se merecen un homenaje. Se quitan horas de su descanso para ensayar, ensayar y ensayar. Cogen sus bártulos y se echan a la carretera para llegar a tiempo de montar todos los instrumentos y hacer una actuación digna, profesional y a gusto del cliente. Bravo por los grupos anónimos que quizás no lleguen a grabar un disco, pero como dijo la gran Aretha Franklin “una canción es buena si hace feliz a alguien”. Yo añadiría: y si los que la interpretan ponen todas sus ganas, mucho mejor.



Espera, espera, espera. Esto es La Bodeguita del Naranjito ¿verdad? Y el Naranjito no tiene una réflex ¿verdad? ¿Solución? Llamo mi amigo Lolo (desde hoy creo que solo seremos compañeros) y le digo que me mande una foto de una actuación. Y aquí es cuando se me ha caído el mito. Lolo, vale que os busquéis la vida dando conciertos, vale que aguantéis a  gente marchosa en veladas y verbenas, pero ¿teloneros del Paquirrin? ¿del dilley Kiko? Lolo, por favor, quillo ¿en serio? ¿teloneros del niño de la Pantoja?

 Mi amigo Lolo es el más guapo y él que tiene más pelo



En fin, larga vida a Los Forgloris