Bueno, pues otra vez ando por
aquí. Parece que se convierte en tradición mis guadianescas apariciones, y eso
que a principio de año me propuse darle caña al blog. También me propuse dejar
de fumar, volver a hacer deporte, terminar Los Pilares de la Tierra, seguir con
la construcción de la Bounty, … Tengo que romper con esa tradición de abandonar
La Bodeguita momentáneamente y darle la continuidad que se merece. Y otra
tradición que tengo que eliminar es la de los domingos. Veréis.
Antes, cuando nuestros
churumbeles eran pequeños, todos los domingos y fiestas de guardar teníamos que
visitar a los abuelos. Más tarde, cuando ya no podíamos tirar de ellos para
hacer lo que nuestros progenitores nos “obligaban”, tocaba lo de los calentitos
(léase churritos). Y allí estaba yo, en la cola de la freiduría para llevarle
el desayuno a mi prole. Pero como la edad no perdona, ni siquiera a mis hijos,
un finde mientras yo bajaba ancá la
Sofi para comprar la rueda correspondiente, me crucé en el portal con mi
churumbel el mayor que venía de marcha, de la biblioteca o de visitar museos,
no me acuerdo pero de una de estas cosas regresaba, eso sí, mu tempranito. Llegamos a un acuerdo: Tú o tu hermana, el primero que llegue a casa, es el que se sube los
calentitos dominicales. ¡Ea! otra tradición eliminada, o casi, porque a mi
parienta también le gustan los churritos un dominguito por la mañana.
Pero la que tengo que eliminar es
la tradición dominguera que me trae de cabeza últimamente. Me trae de cabeza y
está tirando por tierra mi reputación de tío formal, serio, responsable,
elegante, etc. (esto último lo pensaba poner en negritas, pero iba a quedar una
mijilla pedante).
Al grano que me enrollo. No es
por falta de previsión cuando hacemos la lista de la compra, no es que en mi
casa se use para otra cosa que no sea su cometido, no es por nada de esto, es
simplemente coincidencia. Coincidencia es que durante las últimas semanas,
cuando me dispongo a dar mi paseíto domingueromatutino
para comprar el pan y el periódico, mi queridísima esposa me dice eso de: acuérdate de
comprar papel higiénico que solo queda un rollo. Tal como suena, compra papel higiénico. Y no un día, no,
¡durante tres domingos seguidos!
Asi, que este que torpemente
aporrea las teclas, sale a eso de la 13:30 PM, la hora ideal para el piquislavis. Primera parada, la
panadería. Aquí sin problemas, lo habitual entre un Bético y un panadero
sevillista, pero bien. Después el encargo de la madre de mis hijos. ¿Dónde? Po donde va a ser, en la tienda del moro
que está abierto siempre. Que pensabais ¿que el Mercadona va a abrir un festivo
para los desavios del Naranjito? El
moro y el chino son las únicas tiendas abiertas pero los chinorris tienen el local un poco retirado de mi zona habitual.
Paissa, no cabe en bolsa, llevar del asa. Y el Naranjito paseando
por el barrio los nosecuantos rollos.
¿He dicho antes que esto me ha pasado tres semanas seguidas? Esto y lo que
sigue, es que soy un bicho de costumbres raras.
Y ahora a por la prensa. Paso por delante de una bodeguita real, unos
cuantos parroquianos disfrutando del solecito
y las tapitas. Y la mayoría me conocen de unos masters que hacemos viendo la
tele y solucionando el país. Y la mayoría sonríen levemente cuando son ¡tres
domingos seguidos! los que llevan viéndome. Sigamos.
Ahora paso por El Mesón. En la
ventana de la cocina mi paisano Domingo (Domingo es su nombre) ¡tres domingos
seguidos! diciéndome eso de Paisano no te
preocupes que nos salvamos, que no bajamos a segunda, el papel regálaselo a los
palanganas que veras la que le daremos en la güefa.
Continúo con la ruta. Por fin la
prensa, otro cachondeito.- ¿Qué pasa? ¿Qué traes tu propio papel para
que el Marca imprima los periódicos? –No
quiosquero, para el Marca no, para tu periódico La Razón, so mamón.
Bueno, la última paraita. Ahora a relajarme. A tomarme
una cervecita con un platito de Lupinus albus, conocido mundialmente por chochitos. Rodeado de buenos amigos y
amigas, sobre todo una amiga de mi mujer (que daño nos hacen las amigas de
nuestras mujeres). –Hola Carlos Renova, y
tu mujer ¿no baja?.
Mu grasiosa la amiga de mi mujer, pero más grasiosos los otro tertulianos. Cada domingo me dicen eso de ¿no se te ha olvidado comprar algo? No, mamones, no se me ha olvidado ni se me
olvidará.
Foto del Naranjito (con el teléfono, aún) |
Ahora, cada vez que voy al Carrefú, al Día, al Supersol, al Mas, al
Mercadona o a cualquier super, esté o no esté en la lista compro un paquete de
papel higiénico, con eso tengo reservas, por si las moscas.
Por cierto, se me olvidaba, ayer
estaba en la cola del super en la caja 4. En la 15 estaba la “amiga” de mi
mujer. Desde lejos le enseñé el paquetito de marras y, muy sonriente le dije: Que pases un buen día Mariangeles Ausonia.
¡¡ Llevátelo a papel !!
Jajajajaja buenos días, caballero. Deja el papel de vater y pasa por el castillo a tomarte un cafelito, anda.
ResponderEliminarCuenta con ello, Alteza. Ahora en casa hay "oberbuquin" en el armario del cuarto de baño.
EliminarUna reverencia, mi Señora.
Quillo, lo que ha cambiado el Mundo,
ResponderEliminarPasamos de las hojas con menos tinta del ABC, al de la Pajarita.
Y ahora al de las tres capas y perfumado.
Y apreciado Amigo Naranjito, no te pierdas tanto, que necesitamos leer, cosas positivas, como sueles hacerlo, para ver la Vida mas alegre.
manolo
Ahora los hay hasta de colores, te lo digo yo que soy todo un experto.
EliminarComo no te tomes la vida con filosifía apañaos estamos.
Un abrazo.
Ese apetitoso aperitivo está para comérselo...
ResponderEliminarSalu2, Naranjito, que ya se te echaba de menos.
Y gratis.
EliminarYa os daré la brasa co os mereceis.
Un abrazo.
que arte tienes primo mi primo favorito el de maravillas del saber.jajaja besos de tus primas mj a
ResponderEliminarEso de "maravillasdelsaber" es un estigma que tengo igual que cuando mis tíos paternos me dicen lo del "cachoverea" o las "piedrasdeantiguamente". Pero se merece una entrada en la Bodeguita.
EliminarUn abrazo, prima
Al final me he quedado con las ganas de saber para qué tanto papel higiénico. ¿Estás seguro que no tienen nada que ver con la eliminatoria del jueves? (te reconozco que tengo yo más miedo que tú)
ResponderEliminarTiembla Pater, la victoria para nosotros será un triunfo, para ustedes...
EliminarEl papel higiénico lo dejaré para Gol Sur el partido de vuelta, jejej
Un saludo
jajajajaj, oye a ver si se convierte en tradición la compra dominguera del papel...; pero yo seguiría con la de los churros, si o si
ResponderEliminarNo creas, ahora, más de un domingo tengo que comprar ración doble. Las cosas de tener hijo con novia.
EliminarUn beso, Maria Eugenia
!Ostras! que cuando digo ración doble me refiero a los churritos, A ver si mi nuera me va a interpretar mal.
EliminarOtro beso, para ambas.
A la señora Mariángeles Ausonia no se le ocurrirá pitorrearse de nuevo de ti. Eso está claro. jajajajajajaaj
ResponderEliminarY digo yo... Que el papel higiénico no se caduca, hombre por Dios. Compra, compra para que no tengas que ir de domingo en domingo, criatura.
:)
Un beso, Naranjito!!
No creas Lourdes, Mariángeles sigue pitorreandose de mi muy a menudo. Encima es amiga de mi mujer, la muy puñetera.
EliminarUn abrazo.