Decíamos
ayer…, es lo que vino a decir Fray Luis de León después de pasar una temporada
lejos de sus obligaciones habituales y
como últimamente tengo La Bodeguita
abandonada, me he permitido la licencia de apoderarme de sus palabras.
Ná, que no me
pasa ná. Es que cuando me disponía a sentarme y aporrear el teclado con mis
torpes dedos, como que no tenía ganas. Mi hijo (no sé a quien sale con la
ironía que gasta últimamente) me dijo que si estaba pasando por la crisis esa a
la que llegamos algunos hombres de mi edad. ¿Crisis, what crisis?, que dirían
los ínclitos Supertramp. -Si papá, te dejas coleta, te compras una Harley
Davidson y te recorres toita España a lomos de esa peaso máquina. -Hombre,
veras, lo de la coleta no es de mi estilo y lo de la Harley no estaría nada
mal, pero no me llega el sueldo para ese caprichito. Además, niño, que no tengo
crisis de ningún tipo. Simplemente es que estoy atontao últimamente. Pero no te
preocupes que me pongo las pilas de litio del bueno y veras como en un par de
días La Bodeguita vuelve a abrir para mi deleite y de mis abandonados
seguidores.
Pensaba
comenzar esta entrada con lo clásico de: espero que al recibo de la presente os
encontréis bien de salud, nosotros bien gracias a Dios; pero me resultaba
demasiado clásico para mi estilo. Así que os diré que: la familia como siempre,
cada uno a su bola; el trabajo bastante bien, cada día mucho más y las
perspectivas mucho mejor (increíble pero cierto); la salud de “jierro” que es
distinta a “salud de hierro” (esto en una entrada aparte, mierda de colesterol
y ácido úrico, poquito pero colesterol y ácido úrico al fin y al cabo); las
ganas de meterme de nuevo en el mundo blogueril renovadas y a agobiar al
personal con mis batallitas, si no, al tiempo que tengo un montón de historias
pendientes.
Y ahora os
tengo que dejar, esta tarde estoy invitado a una presentación de un libro de
poesía de mi amigo Luis Miguel León. Bueno, eso de amigo habría que matizarlo.
Vamos a ver: la presentación es en el Salón de los Espejos en el Casino de la
Exposición de Sevilla. Mu bonito, di que si Luismi, mu bonito el salón y los
invitados. Pero digo yo, ¿tú no fuiste el que presentaste un libro de poesía
erótica de tu amiga Nerea Riesco en un sex shop? ¿Y por qué no nos invitaste a
tus contertulios habituales? ¡Esta me la pagas!
Bueno, que
estoy de nuevo en la brecha y esta vez pienso dar la lata muy a menudo, si nó
al tiempo. A La Bodeguita tengo de darle vida para que las telarañas no se me
cuelen por las rendijas de las neuronas
y eso sí que es chungo, más que el puñetero colesterol y el ácido úrico,
poquito pero colesterol y ácido úrico al fin y al cabo. ¿A que el mamón del
médico me quita la cerveza? Po cambio de médico !joé!
Y para
terminar, un mensajito: a ese cabroncete japonés y a ese mamoncete filipino que
han intentado colarse en mis cuentas de correos (jilipoyas, si nada más que
recibo publicidad): como sigáis intentándolo, cojo el primer galeón de Manila
que salga para aquellas tierras y os corto los cataplines de cuajo. Lectores, perdonadme
esto último, es que estoy dejando de fumar y tengo los nervios un poquito, solo
un poquito, alterados. (Pero los güevos se los cortos).
Un abrazo a
todos a hasta muy prontito.
Hombre, Naranjito:
ResponderEliminar¡Qué alegría más grande me da verte de nuevo!
A ver si se te pasa esa morriña ¿has probado a tomarte una naranja todos los días?
Salu2.
Pues anda que no he pasado por La Bodeguita y siempre me encontraba las puertas cerrada y el cartel de "Vuelvo en cinco minutos", bienvenido!!!!
ResponderEliminarYo también tuve problemas como mi cuenta, estoy aprendiendo "karate" para cuando me encuentre con el japonés, un saludo.
¡Jo! Naranjito, mejor así,, que sea el no escribir, por ese colesterol y el acido uri
ResponderEliminarY no andes embarcandote, para cortar no se qe...
Saloudos, manolo
Picha, que a mi me dan sofocos de menopausia y también se ríen. Ya les llegara.
ResponderEliminarun abrazo
Ea, sácate algo de picar. Bienvenido. Un beso, caballero.
ResponderEliminarQuillo Dyhego, ¿lo de la naranja es por el poquito de colesterol y una mijita de ácido úrico? ¿si?, po vale.
ResponderEliminarQue mañana, con tranquilidad, me paso por tu blog y me pongo al día.
Un abrazo y grácias por tu interes.
Mamé, ¿eras tú el que llamaba con tanta insistencia? Perdona el no haberme enterado de los golpes en la puerta. Por cierto, pa golpes los que les vamos a pegar al IP del japones o filipino ese que nos quiere traer por la calle de la amargura.
ResponderEliminarUn abrazo, compañero.
Manolo, tu tranquilo que no me embarco de nuevo, y menos para cortarles los atributos masculinos a los notas esos. Y sobre el colesterol y el úrico, nada que no tiene importancia, la pringá y las gambitas (arroceras) no me las quitan. Al menos eso creo.
ResponderEliminarUn estrechón de manos amigo.
Pedro, mientras nos dé sofocos es buena señal. Somos de sangre caliente. Mas de uno quisiera llegar a nuestra joven edad como estamos nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo, choquero.
Querida Ana, para Vuestra Alteza algo de picar siempre tendrá estu su Bodeguita.
ResponderEliminar¿Me permite vesarle la mano?
Una reverencia Princesa.
!Joé! que no me acostumbro a escribir en el portatil heredado de mi hijo. La V y la B muy juntitas, ¿donde puñetas estan las flechitas de arriba y abajo?,¿como vuelvo para atras?, y esta pantallita chica <1si mi dedo meñique es mas grande que ella!. Nada, que me vuelvo al viejo armatoste de toda la vida, ¿que puñetas es eso de <1? Lo dicho: teclado grande ande o no ande. !Hijo! ¿como pongo los acentos?
ResponderEliminarMi Narangito del alma ¡pero si hemos estado dormidos los dos a un tiempo! y hemos despertado casi a la vez, ésto es por algo ¿que no?.
ResponderEliminarA mí me han sacado 300 en colesterol y dice mi médica Carolina que es muuuxo, lo del ácido úrico no me lo he mirao.
Bueno, el asunto es que has vuelto.
Me encanta que estés aquí.
Un abrazote.
Tortuguilla, despues de nuestro "descanso" estamos de nuevo en la brecha.
ResponderEliminarUn abrazo.