Esta batallita es antigua y seguro que ya la conocéis pero
como hace unos días salió el tema en una conversación entre amigos se me ha
ocurrido recordarla. Bueno, he dicho que es antigua, del año 2016 tampoco hace
tanto, o sí, que también puede ser.
La “Royal Navy”, o sea, la marina inglesa, construyó un nuevo
buque rompehielos y de investigación oceanográfica y submarina. Uno de esos que
están pintados de rojo por normativa en este tipo de barcos, como el Hespérides
nuestro pero inglés.
Al gobierno inglés se le ocurrió la feliz idea de lanzar una
campaña por la red, para decidir entre los internautas el nombre con el que
bautizar al nuevo barquito de su grasiosa
majestad. Y empezaron a surgir nombres a cual más “grasiosos”, a saber:
Poppy May, Usain Boat, Boatimus Prime, What Iceberg,
Boatasaurus Rex, y paro de contar porque estos ingleses y su humor tan especial
me dan sarpullido.
Pero claro, hay estaban los señores de ForoCoches para votar
y hacer votar a los internautas españoles y proponer un nombre adecuado para un
barco de la marina inglesa que se iba a dedicar, entre otras cosas, a la
investigación submarina.
¿Qué nombre propusieron? Pues Blas de Lezo. ¿Y quién fue Blas de Lezo? Pues fue un almirante
español, uno de los mejores estrategas que ha existido por los siete mares.
Para no alargarme mucho solo diré que él dirigió la defensa de Cartagena de
Indias del asedio de los hijos de la gran Bretaña. Los británicos con 180
barcos, el Blas con poco más de 6 y las defensas y los habitantes de la ciudad colombiana.
El Almirante español les dio tela marinera a los invasores y les hundió unos
cuantos de navíos. Nada, que los ingleses tuvieron que dar media vuelta y
olvidarse de aquellas aguas. Incluso, los muy chulos, tenía acuñadas monedas y
medallas conmemorativas de lo que ellos creían una victoria fácil. Pero no solo
en esta batalla les hundió barcos no, en otras ocasiones también mandó a pique
muchos navíos con la bandera de la Union Jack en popa.
Foto de Diario de Sevilla |
Volvemos a la encuesta. El gobierno inglés, al darse cuenta
que el nombre de insigne marino vasco iba ganando, lo retiró de inmediato y no permitió
que se pudiera votar por esta alternativa histórica. Ni se les pasaba por la
mente que un almirante español, al que llamaban medio hombre, azote de ingleses,
corsarios y filibusteros, tuerto, con solo una pierna, con un brazo inutilizado
y más cicatrices en su cuerpo que un torero que se arrima al toro, le diera
nombre a su ultima joya de la corona en materia de investigación.
De nada sirvió la excusa de que nadie había contribuido como
él para fomentar esa investigación marina que iba a hacer el barco mencionado.
Bueno, es que se dieron cuenta también, porque listos, lo que se dice listos,
un poquito son los súbditos de Isabel II, que gracias a este señor, existen
infinidad de pecios ingleses donde poder sumergirse para investigar. ¿No
queríais investigaciones subacuáticas? Pues ahí tenéis una jartá.
Al final, los ingleses escogieron un nombre muy adecuado, muy
de humor inglés porque el humor español son tan cortitos que no llegan a
entenderlo. A saber, “Boaty McBoatface” algo así como “Barquito Carabarco”.
Bueno, pues nada, que a ver si ahora Mr. Boris Johnson, el Primer
Ministro inglés, cuando esté confinado, tomando cervecita española, no
Cruzcampo, pero española, se le ocurre algo más inteligente. Y otra cosa Mr.
Boris, como te coja la gente de Murillo Peluqueros vas a parecer de buena
familia.
Los hijos de la gran bretaña, aquellos de la pérfida albión no se cansan de venir a por caldo, pero lo cierto es que ellos como los franchutes celebran y respetan a sus gentes, no como en España que nuestros Grandes ya sean marinos, monarcas, escritores... son ninguneados. Un abrazo
ResponderEliminarAquí parece que está mal visto hablar bien de nuestros antepasados ilustres. Yo sigo pensando que la ESO ha hecho mucho daño a las nuevas generaciones. Un abrazo.
EliminarNo hace muchos días estando con unos amigos también comentamos las hazañas de Blas de Lezo, un militar con una biografía muy interesante.
ResponderEliminarCuidad esa estatua sevillana, parece que son ya demasiados los que reniegan de aquellos españoles ilustres de otro tiempo.
Un abrazo.
Lo que no saben es que, lo que somos hoy, tanto lo bueno como lo malo, se lo debemos a ellos. Para eso está la historia, para aprender.
EliminarUn abrazo.
Cuanta soberbia junta y luego no saben ni comer. Vienen a España y flipan.
ResponderEliminarSaludos.
¿Comer? ¡pero si no saben ni tomar cervecita fresquita! Eso si, los balcones les gustan una jartá.
EliminarSaludos.
Tan interesante como oportuna entrada, sigues estando en magnifica forma...
ResponderEliminarSuscribo enterito el comentario de nuestra amiga Ester.
Abrazos.
No creas, me falta un poquito de rodaje pero estoy entrenando. Ya somos dos que coincidimos con Ester.
EliminarAbrazos.
Jajajajaajaja es que Blas en inglés no tiene "caché" pero si el sr. Boris se pasa por Murillo Peluqueros lo mismo sale hecho un pincelín y lo ve todo de mejor color.
ResponderEliminarNunca se sabe, abrazote utópico.-
Bueno, si el Boris se pasa por la peluquería de mi amigo Murillo, seguro que termina en el Mesón Pino Montano que está justo al lado. O por el bar Los Gallegos que está enfrente, creo que le gusta mucho el morapio.
EliminarUn abrzo.
Son muy tradicionales y muy infantiles a veces. Les conozco muy bien y son bastante cortitos. Al Boris habría que meterle en un barril de bitter y lanzarlo al canal.
ResponderEliminarAbrazos.
Por favor, Airblue, cuidemos el medio ambiente y salvemos los mares. Los peces y otras especies marinas no tienen culpa.
EliminarAbrazos.
Interesantísima entrada! Y gracias por compartir la anécdota del troleo que no tenía idea, pero es una buena cosa para contar a los amigos ja já.
ResponderEliminarMe da curiosidad leer también en los comentarios que a las nuevas generaciones se les está cambiando la historia o desarrollan una adversión por héroes antiguos? por qué?
Aquí desde chico nos hacían estudiar en la historia las hazañas de los navegantes españoles, su conquista de América y los Reyes o las guerras con los ingleses. Igual aquí en Chile se observa ultimamente una tendencia a exagerar la importancia del indio y casi condenar la llegada de los europeos, tema complejo pero parace que en constante -y lamentable a mi gusto- revisionismo.
Un gran abrazo desde el sur de CHile, querido amigo.
Por aquí también se estudiaba antes. Ahora por lo visto quieren que se estudie otras cosas, de historia poquito.
EliminarUn abrazo.
Qué interesante!
ResponderEliminarNosotros tuvimos varios líos con los ingleses (bah, en realidad ellos con nosotros, y con todo el mundo). Es como si nosotros hubiésemos votado por el nombre "Gaucho" Rivero, el que se sublevó en la toma de las Malvinas Argentinas.
Lo de la votación me recuerda también lo que hace la Nasa con sus rover espaciales. Y así es como se llaman Curiosity, Opportunity, Perseverance... y todo así. Aunque en esos casos va a concurso y eligen luego el nombre que más les gustó.
Abrazos, Naranja
Eso de Gaucho Rivero es muy bueno. Y después el barquito que haga inspecciones cerca de la Tierra de San Martín.
EliminarUn abrazo.